La ULE asesora a cinco emprendedoras de Villaquilambre en la puesta en marcha de sus proyectos
El Grupo de Innovación Docente de la Universidad de León para la Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa (Transcue), que coordina la profesora Almudena Martínez Campillo, en colaboración con el Centro de Información y Asesoramiento a la Mujer e Igualdad (CIAMI) del Ayuntamiento de Villaquilambre, cuya responsable es Carmen Fernández Llamazares, ha llevado a cabo durante el primer semestre del curso académico un proyecto de aprendizaje-servicio, titulado 'Fomentando el desarrollo rural sostenible a través del emprendimiento femenino: un proyecto de Aprendizaje-Servicio multidisciplinar e interactivo', que ha concluido con un balance muy positivo.
El aprendizaje-servicio es un método de innovación docente que consiste en complementar la formación universitaria de los estudiantes con la aplicación de los contenidos aprendidos en clase a la prestación de un servicio gratuito a la comunidad local. En este caso se pretendía contribuir al desarrollo rural sostenible a través del apoyo al emprendimiento femenino en el municipio de Villaquilambre.
Con dicha finalidad, cinco equipos multidisciplinares de estudiantes, tutelados por los profesores y apoyados en las TIC para facilitar la interacción entre los distintos participantes, prestaron un servicio integral de asesoramiento a un grupo de mujeres del municipio que necesitaban impulsar sus iniciativas empresariales.
Cinco proyectos de emprendimiento
Se trataba de cinco proyectos de emprendimiento sostenible denominados 'El taller de mis locuras', 'La casita verde', 'Metamorfosis', 'Nubes de algodón', y 'Lidia Retuerto ATELIER', que además de generar empleo y riqueza, derivaban beneficios sociales y ambientales en el entorno más cercano.
Las emprendedoras implicadas han realizado un balance muy positivo de su participación en la iniciativa, y han reconocido que el servicio de asesoramiento prestado por los estudiantes “ha sido muy útil para resolver las dudas y atender las necesidades de información a la hora de impulsar los proyectos de emprendimiento sostenible”.
Por su parte, la experiencia ha resultado también muy útil para la formación de los estudiantes, y ha incrementado su interés y motivación por la asignatura, así como la comprensión de los contenidos explicados en clase.“Es importante destacar, -concluye Almudena Martínez Campillo-, que la opción de emprender se ha convertido en una de las escasas alternativas para solventar las debilidades del mercado laboral en el mundo rural, y que las mujeres emprendedoras juegan un papel fundamental para el desarrollo económico y social, y constituyen agentes clave para frenar la despoblación y garantizar la supervivencia de las áreas rurales”.
