El Ayuntamiento de León celebra finalmente este miércoles con posibilidad telemática

Pleno Ayuntamiento de León. Foto: César

Tras la fuerte polémica por la suspensión judicial del último pleno municipal previsto para el 27 de marzo el Ayuntamiento de León celebrará finalmente este miércoles, 8 de abril, una sesión plenaria que incluye la posibilidad de asistencia de forma telemática. La convocatoria de finales de marzo provocó una gran enfrentamiento entre Ciudadanos y el equipo de Gobierno del PSOE a cuenta de si debía celebrarse ya de forma telemática o no.

El partido naranja solicitó judicialmente su suspensión cautelar, concedida por un juzgado de lo contencioso-administrativo, provocando que el alcalde de León, José Antonio Diez acusara al partido que lidera Gemma Villarroel de boicotear la actividad municipal y ocasionar un perjuicio al funcionamiento administrativo. La portavoz de Ciudadanos alegaba que el recurso se debía a que “Nuestra prioridad tiene que ser la salud pública y evitar ser cadena de contagio”.

Ciudadanos pidió que el pleno de finales de marzo fuera ya telemático y desde el equipo de gobierno se esgrimía la necesidad de una convocatoria presencial para habilitar reuniones telemáticas, según informaba la Secretaria General en un informe. En medio de la polémica judicial el Gobierno cambió la Ley de las Bases de Régimen Local para adoptar “medidas conducentes a garantizar el funcionamiento democrático y eficaz de las Entidades Locales”, y habilitando de forma expresa reuniones telemáticas en tiempos de estado de alerta.

El pleno de este miércoles tendrá lugar a las 10 de la mañana a puerta cerrada y sus miembros pueden participar de forma remota si así lo desean, o bien asistir desde el salón plenario. Incluye seis puntos del orden del día, entre ellos una modificación puntual de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Ayuntamiento de León, modificación de créditos, dación de cuenta de decretos de Alcaldía y una Declaración Institucional en relación con la pandemia del Coronavirus.

El pleito que suspendió el pleno de marzo sigue de momento vivo ya que las medidas judiciales eran cautelarísimas y no suponían una sentencia del fondo del asunto, que deberá dilucidarse salvo que las partes pidan finalmente su cierre.

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