Majo confía ahora en que la Junta asuma las competencias que mantiene injustamente la Diputación

Toma de posesión del delegado Territorial de la Junta de Castilla y León en León, Juan Martínez Majo. / Carlos S. Campillo / ICAL

Elena F. Gordón / ICAL

“Pretendo una Delegación de puertas abiertas. Lo dije en otra parte -la Diputación provincial- creo que lo cumplí y quiero cumplirlo aquí; que todo el mundo pueda traer aquellas necesidades que pueda tener y, sobre todo, aportar ideas en favor de León y la provincia”. Es la manifestación de intenciones que hizo hoy Juan Martínez Majo antes de tomar posesión como nuevo delegado territorial de la Junta en la propia sede institucional.

Majo, que sucede en el cargo a Guillermo García, aseguró que asume “con placer, honor y orgullo” lo que definió como “un nuevo reto, una responsabilidad importante en la vida, pero también en lo político y lo profesional, que intentaré llevar, desde el punto de vista institucional, lo mejor que sé y puedo”.

El también presidente del Partido Popular en León mantiene ese cargo pero abandona sus puestos de portavoz de la formación en la Diputación provincial y en el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan. Preguntado al respecto, comentó que será “respetuoso” y sus reivindicaciones serán de puertas adentro; “pocas veces las veréis en la prensa. Me gusta hablar en los despachos, que creo que es donde se hablan y se tratan las cosas”.

“A mí me gusta sumar, no restar. Creo que León es una provincia fuerte y quiero que sea fuerte; cuanto más fuertes seamos los leoneses dentro de esta Comunidad y la Comunidad sea fuerte a su vez, mucha más fuerza -valga la redundancia- podremos hacer”, dijo y añadió que León “tiene muchas necesidades, pero también muchas posibilidades y tenemos que creérnoslo los propios leoneses, que a veces somos muy autocríticos, porque oportunidades sí que hay y tenemos que intentar aprovecharlas y eso también es una labor de la Junta”.

Respecto a las competencias impropias, sobre las que la Diputación reclamaba más implicación de la Junta, comentó que “siempre fui reivindicativo pero también responsable. Se ejercen porque en su momento se quiso cumplir esas obligaciones y a partir de ahí lo que tenemos es que intentar buscar la fórmula, también económica. Todo va en cascada y la Junta tiene un problema de 440 millones, que crecerá si el Gobierno central no dota económicamente para poder ayudar a esas personas”.

“Es verdad que existen determinadas competencias que calificamos como impropias, pero también hay que asumir cada uno la responsabilidad que nos toca. En todo caso, la Junta tiene que dar un paso en la defición de esas competencias, como lo va a hacer con toda seguridad”, apuntó. También mostró su deseo de convertirse en transmisor efectivo de las políticas de la Junta, “que hace muchísimas cosas que son desconocidas para la mayoría de la ciudadanía, pero también intentaré coordinar la labor de las distintas consejerías en la provincia e impulsar aquellas iniciativas que puedan ser buenas para el desarrollo de la provincia de León”.

El consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, presidió la toma de posesión de Juan Martínez Majo, al que deseó “en el convencimiento de que su labor va a ser magnífica, toda la suerte del mundo y al que ofreció ”no sólo con el apoyo del consejero de la Presidencia, como máximo responsable tutelante de las delegaciones territoriales sino también de otros consejeros, como Juan Carlos Suárez-Quiñones, que también nos acompaña hoy, y el resto de miembros del Consejo de Gobierno“.

El nuevo delegado, añadió, tiene “una encomienda muy importante, que es ser la voz de la Junta de Castilla y León y evidentemente vamos a pedirle un especial esfuerzo para poder escuchar todas las demandas, para que explique todas las políticas que desarrolla la Junta y de cercanía para defender los intereses de León y de su provincia ante la Junta porque, evidentemente, los intereses de León son también los de la Junta”.

Ibáñez, comentó que tal y como ha señalado anteriormente el presidente Alfonso Fernández Mañueco, la Junta pretende “un gobierno transformador y regenerador, intensificar su presencia de en todas las provincias y hará un ”especial esfuerzo de acercamiento para el conocimiento de las demandas que existen en todos los territorios de la comunidad y ser cercano en las respuestas que se vayan a dar a esas situaciones“. Ese esfuerzo de cercanía se traducirá, entre otras formas, dijo, en el recorrido que Mañueco por todas las provincias en próximas fechas para poder tener encuentros con los principales responsables a nivel institucional de las administraciones públicas y también con el tejido social y civil.

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