El PP y Podemos bajarían en León en las autonómicas a costa de Vox y un subidón de Ciudadanos
León es una de las tres provincias de Castilla y León que perderá, por la sangría poblacional, un procurador en las Cortes de Castilla y León en estas inminentes elecciones autonomicas del 26 de mayo de 2019, pasando de elegir 14 a 13 electos.
Esta circunstancia hace que la batalla política de mayo sea aún más encarnizada entre todos los partidos. Una batalla en la que la encuesta elaborada por Sigma Dos para la Agencia Ical, a menos de 100 días de los comicios, considera desigual para los diferentes partidos, dado que según los encuestados el PP y Podemos llevarían con diferencia la peor parte: ambos bajarían a costa sobre todo de Vox y una potente subida de Ciudadanos.
Según esta encuesta de intención de voto, aunque antes de convocarse elecciones generales el 28-A y antes también de la sacudida que puede suponer la dimisión fulminante de la 'popular' Silvía Clemente, actual presidenta de las Cortes, el Partido Popular seguiría siendo el que más papeletas tendría para elegir a los parlamentarios autonómicos. Pero su porcentaje de apoyo bajaría del 32% de los últimos comicios al 28%. De este modo, la encuesta le otorga entre cuatro y cinco procuradores, cuando en la actualidad suma cinco.
El PSOE, por su parte, cosecharía un apoyo similar, de en torno al 27%, pudiendo conseguir también 4-5 escaños (tiene cinco a día de hoy). Ciudadanos por su parte viviría el espaldarazo que se espera en toda la Comunidad y en León obtendría dos actas, cuando hoy sólo tiene una, porque casi duplicaría, hasta el 15%, la intención de voto declarada.
La encuesta dice que también Vox entraría de manera potente en el hemiciclo por la provincia leonesa, directamente con un procurador, mientras Podemos descendería de casi el 13 al 9%, pasando de un dos procuradores a sólo uno.
El de UPL estaría en el aire, porque Sigma Dos le otorga un punto menos porcentual de votos, aunque al ser el único partido regionalista representado las encuestas tienen a fallar bastante en lo que al leonesismo respecta.
En general, el PP mantendría su mayoría en todas las provincias de Castilla y León, pero sufriría un desgaste generalizado e importante, especialmente en las provincias de Ávila y Salamanca. El PSOE crecería significativamente en Valladolid y de forma moderada en Burgos, Salamanca y Segovia y bajaría en Soria, donde gobierna.
Ciudadanos aumentaría su apoyo en todo el territorio, pero llegaría al 20 por ciento en Ávila y Burgos. Vox se haría fuerte en Ávila, Burgos, León, Salamanca y Zamora y Podemos se derrumbaría también en toda la Comunidad, aunque mantendría el tipo en Salamanca.
