Sorprenden a cuatro furtivos de Madrid, Toledo y Guadalajara cazando en el Parque Natural de Babia y Luna

La Guardia Civil instruye diligencias en calidad de investigados contra cuatro cazadores furtivos a los que un equipo del Seprona de Villablino sorprendió sin autorización en los cotos de Meroy y La Cueta, ambos pertenecientes a la comarca leonesa de Babia. En la operación, los agentes incautaron dos rifles de caza, cada uno de ellos provisto de un silenciador para que ganaderos y pastores no pudiesen oír los disparos, así como un visor térmico prohibido para la caza y que facilita en gran medida la búsqueda de la especie a cazar.

Tanto los cazadores, residentes en las provincias de Madrid, Toledo y Guadalajara, como los efectos intervenidos ya han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia de Villablino por un supuesto delito relativo a la protección de la fauna. Además, los furtivos se enfrentan a varias infracciones administrativas a la Ley de Caza de Castilla y León y al Reglamento de Armas.

Conforme al Código Penal, estas cuatro personas se enfrentan a una pena de multa de ocho a doce meses e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar o pescar por tiempo de dos a cinco años por cazar en coto ajeno.

En cuanto a infracciones administrativas, se enfrentan a infracciones graves y muy graves a la Ley de Caza de Castilla y León que van desde los 390 a los 3.900 euros para las graves y desde los 3.900 a los 78.000 euros para las muy graves, así como infracciones al Real Decreto que regula el Reglamento de Armas.

Desde el pasado 15 de julio, inicio de la veda del rebeco, la Guardia Civil viene realizando servicios dirigidos prevenir la caza furtiva de la especie. Esto es debido al gran aumento de cazadores foráneos de la región que se interesan por adquirir el trofeo de la misma, explicaron fuentes oficiales.