Piden dos años y medio de cárcel a un hombre acusado de maltratar a su mujer durante los cinco años que duró su matrimonio

Juzgados de León. / Carlos S. Campillo / Ical

Un hombre se sentará en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número 2 de León acusado de un presunto delito de maltrato habitual a su esposa que se prolongó durante los cinco años que duró el matrimonio. La Fiscalía pide para él una pena de dos años y medio de cárcel.

Según las calificaciones provisionales de la Fiscalía a las que ha tenido acceso este periódico, el acusado, desde el inicio de la relación, en 2012, de forma reiterada en el tiempo y con la intención de menoscabar su salud física y psíquica sometió a su pareja a “vejaciones, agresiones y otras actuaciones insistentes y deliberadas en el seno familiar”.

Además, añade el mismo auto, le profería expresiones como que era una “fracasada”, una “muerta de hambre”, una “mala madre”, una “hija de la gran puta” y que iba “acabar con ella”. El fiscal considera que esta conducta hizo que la víctima se sintiera anulada y con gran temor hacia el acusado, motivo por el que no presentó denuncia alguna hasta finales de 2017.

El Ministerio Público destaca además un episodio en el que el acusado agarró violentamente a su mujer por el cuello hasta casi conseguir ahogarla. Unos hechos que se produjeron cuando la víctima estaba embarazada.

Según este mismo relato de la Fiscalía, cada vez que la mujer se negaba a hacer algo que le proponía su marido, éste reaccionaba con violencia. Como consecuencia de lo expuesto, dice el fiscal, la denunciante presenta un cuadro de estrés postraumático concordante con la situación.

El Ministerio Público considera los hechos constitutivos de un delito de violencia maltrato habitual por el que pide para el acusado dos años y medio de prisión y cuatro años de prohibición de aproximación y comunicación con la víctima.

La defensa lo niega y acusa a la mujer de denuncia falsa

La defensa, por su parte, acusa a la denunciante de denuncia falsa y lo argumenta asegurando que se trata de una “venganza” de la mujer porque él se quería divorciar.

Según la representación legal de la defensa la mujer no tiene “la más mínima prueba ni testigos de lo que afirma en la denuncia” y se pregunta cómo pudo lograr que en cinco años “nadie notara nada” de que estaba siendo maltratada. Por todo ello, reclama la libre absolución de su patrocinado.

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